El diseño web no es ajeno al paso del tiempo. Como otras muchas disciplinas (moda, decoración, arquitectura, etc…) está en continua evolución con el fin de adaptarse a los gustos, hábitos y necesidades de los usuarios.

No es necesario ser un experto en las artes plásticas y visuales para ‘adivinar’, al visitar una web, la época aproximada en la que fue diseñada. Y puesto que, con nuestra web, estamos vendiendo imagen y, hablando de marketing, estar a la última es imprescindible, un diseño ‘antiguo’ genera en los visitantes sensaciones de obsolescencia, descuido, abandono,… Eso sin contar con que, en muchas de esas webs, un mal diseño de su estructura y navegación consigue que el usuario se pierda, no encuentre la información y la abandone tan pronto entra.

Hoy en día, todo diseño web eficaz debe ser ‘usable'. La usabilidad» (o facilidad para el manejo intuitivo por parte de los usuarios) es un factor determinante en el diseño de una página web y decisivo en el éxito de cualquier negocio con presencia en Internet. Un factor que parece no tenerse en cuenta cuando nos bombardean continuamente con el ‘hazlo tú mismo’.

Evidentemente, con las herramientas disponibles en la actualidad, es posible diseñar una página web sin ser un experto en la materia. Sin embargo, cumplir con las pautas mínimas de usabilidad, que se ajusten a los hábitos generales de navegación del momento… Eso... Eso es otro cantar…

Y es que lo barato, también aquí, sigue saliendo caro. De poco sirve que te ahorres unos cuantos euros en el diseño de tu página poniéndote tú mismo manos a la obra si, a pesar del esfuerzo, tus visitantes apenas paran en un segundo en tu página porque tarda mucho en cargarse, no se ve en dispositivos móviles, se pierden o no encuentran lo que buscan o, sencillamente, no les resulta cómoda ni atractiva.

Siguiendo el camino iniciado hace pocos años, las tendencias en diseño web para el 2016 siguen centrándose en la usabilidad poniendo el foco en cuatro frentes principales: velocidad de carga, diseño responsive, navegación intuitiva y contenidos visuales.

En el mundo on-line la máxima ‘El tiempo es oro’ cobra especial significado.

Según las últimas estadísticas sobre el uso de Internet en los negocios “reducir 1 segundo la velocidad de carga de tu web puede aumentar un 11% tus visitas y un 7% las ventas”. Evidentemente, analizar y realizar las distintas acciones que permitan reducir el tiempo de respuesta de una página web no suele estar al alcance de un ‘hazlo tú mismo’.

No nos cansamos de repetirlo. Además, si hace tan sólo un par de años hablamos de diseño responsive, ahora hay que hablar de ‘Internet de las cosas’», término que hace