Ya es de todos sabido que Google cambia sus algoritmos de posicionamiento periódicamente para evitar prácticas ‘engañosas’.

El último algoritmo (Penguin 2.0) confirma lo que ya se intuía con la llegada de la anterior versión (Panda) en el 2011.

• Se premia el marketing de contenidos, esto es, su calidad y su originalidad (es decir, no valen copy-paste de trozos sacados de cualquier blog o página de la Red) además de su riqueza en formatos y elementos multimedia (imágenes, videos).
• Los sitios web eminentemente estáticos no conseguirán un posicionamiento óptimo. De ahí la importancia de tener un blog en un sitio web.
• Ha cambiado el valor de los linkbuilding evitando así que acciones de ‘compra’ de links tengan resultados óptimos en el posicionamiento. Ahora sólo servirán los enlaces de calidad, es decir, aquellos que procedan de webs con autoridad reconocida y con contenidos relacionados con nuestro sector.
• Aunque se habla de que las palabras clave ya no son la clave, todavía no se ha demostrado que ya no tengan influencia. Más bien podemos hablar de un cambio en la medida de la densidad de palabras clave que, en un artículo o página, debe de situarse entre un 3% y un 12%. Pasar este límite podría suponer retroceder posiciones en Google.
• También se auguraba la relevancia de las redes sociales. Y aunque ya se escuchan voces que aseguran que no es tanta su importancia, los expertos SEO siguen considerando que publicar, socializar y compartir contenidos es algo básico para mejorar el posicionamiento.

Pero en realidad, el verdadero secreto del éxito en el posicionamiento es el seguimiento de la estrategia SEO.

Los que no sabemos tanto como Google ni tenemos en nuestra mano los secretos del algoritmo, nos intentamos defender estudiando día a día y haciendo muchas pruebas con el fin de mantener nuestras páginas bien posicionadas.

Páginas web y posicionamiento en buscadores. Algoritmo Penguin de Google